«Supone un reto muy grande, pero también una enorme ilusión volver a mi tierra a trabajar duro y aportar nuestro grano de arena para que esta sociedad sea de progreso y bienestar». Esta era la primera reflexión tras tomar posesión del cargo del nuevo consejero de Educación, Cultura y Turismo, Gonzalo Capellán.
Este jarrero nacido en 1972, hijo del alcalde de Haro, sonaba fuerte como relevo de Luis Alegre y así ha sido. Su currículum es envidiable, con una amplia experiencia como profesor universitario y vicerrector de la Universidad de Cantabria.
También sonó para el Gobierno cántabro, y ayer no quiso hablar de ello. Sí confesó haberse sorprendido «gratamente» con la llamada de Sanz, aunque ya fue director general de Cultura de 2003 a 2007.
Subrayó su convicción de que la educación «es un factor clave del futuro de cualquier sociedad», y apostó por aprovechar el reducido tamaño de La Rioja para «hacer cosas innovadoras y de referencia» . También destacó la importancia de las universidades y la investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) para el cambio de modelo socioeconómico que impone la crisis.
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